Los socios de Bleu de Chauffe se han unido en torno a un proyecto cuyos valores esenciales y aglutinadores velan por el respeto a las personas y su entorno.
La proximidad de los actores y la trazabilidad de todos los componentes nos permiten limitar al máximo nuestra huella en el medio ambiente.

El bleu de chauffe es el nombre que se le daba a la chaqueta azul que llevaban los ferroviarios en la época del ferrocarril para calentar el agua y aumentar la presión en las primeras locomotoras de vapor. Así nació la expresión «bleu de chauffe».
En el siglo XX, los obreros y artesanos adoptaron naturalmente esta prenda. De diseño sencillo y confección sólida, el bleu de chauffe es una prenda funcional y amplia, que permite protegerse y estar cómodo durante todo el día.
Inspirándonos en los obreros y artesanos que llevaban estas antiguas bolsas de trabajo, hemos querido infundir a nuestras colecciones estilo, ingenio, sencillez y autenticidad. Esta combinación de elementos, que podríamos calificar de «estilo francés» y que reflejamos cada temporada en nuestras colecciones, es también sinónimo de Bleu de Chauffe y de sus artesanos del trabajo bien hecho.

Las pieles Bleu de Chauffe son naturales y tratadas con productos vegetales. El curtido vegetal consiste en transformar el cuero mediante agentes naturales: mimosa, castaño o acacia. La curtiduría Bleu de Chauffe presta la máxima atención al tratamiento del agua. Después de su uso, el agua se decanta, se vuelve a tratar y se vierte en el río tan pura como cuando entró.